El sector turístico se verá severamente afectado tras la pandemia
Pese a que el Caribe es una de las regiones más visitadas por turistas internacionales, la Organización Mundial del Turismo (OMT) estima que el coronavirus ocasionará una merma de entre 58% a 78% en llegadas, lo que podría ser mortal para una región cuyo principal motor económico es el turismo.
El pasado año la actividad turística en el Caribe representó el 42% de las exportaciones, la economía del visitante aportó el 26% del Producto Interno Bruto (PIB) y generó el 35% de los empleos de la región.
No obstante, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) sostiene que el turismo caribeño ya comenzó a afectarse severamente. La llegada de turistas cayó un 50% en marzo y poco menos de 100% a partir de abril tras la reducción en vuelos internacionales y la paralización de la industria de cruceros.
El escenario que la organización pinta para el resto del año no es nada alentador. De acuerdo con las proyecciones de Cepal, la caída del turismo en el Caribe ocasionará un decrecimiento de ocho puntos porcentuales en el PIB de la región, mientras que el empleo disminuirá nueve puntos porcentuales.
A pesar del panorama, Frank Comito, principal oficial ejecutivo de la Asociación de Hoteles y Turismo del Caribe (CHTA, por sus siglas en inglés), considera que la región está mejor posicionada en comparación con otros destinos.
Comito, quien también es parte del Covid-19 Caribbean Tourism Task Force, afirmó mediante declaraciones escritas que el Caribe está bien equipado para manejar las crisis y que si bien se espera que la recuperación sea lenta, se cuenta con una gran cantidad de infraestructura para facilitar un regreso seguro a los viajes.
“Desde el punto de vista de contagios, probablemente estamos mejor posicionados que la mayoría de los destinos a nivel mundial. El Caribe contuvo el virus desde el principio aplicando protocolos estrictos de seguridad sanitaria. Muchas islas pudieron frenar la propagación local, lo que les permitió comenzar a planificar su reapertura”, señaló Comito.
No obstante, el ejecutivo reconoce que la región se verá severamente afectada en términos económicos, lo que, según entiende, repercutirá en el cierre permanente o la venta de algunos hoteles, además de la paralización de unas 30,000 habitaciones que se construían al inicio de la pandemia. Comito considera que la recuperación será mayor en el segmento de lujo.
“Nuestras economías dependen en gran medida de la economía que generan los visitantes. El coronavirus no desaparecerá prontamente, por lo que tenemos que hacer todo lo posible para minimizar el riesgo tanto para nuestros residentes como para los visitantes mientras reabrimos lentamente el turismo”, puntualizó Comito.
República Dominicana no es la excepción
El pasado año, el turismo local registró una ocupación en establecimientos de alojamiento turístico de un 71.6%, con la llegada de 8,224,431 visitantes, con un ingreso económicos de US$12,004 millones (Enero-septiembre 2019), genera más de 700 mil empleos directos e indirectos, aportando en el 2019 al PIB en torno al 14% de manera directa e indirecta.
Con la llegada del coronavirus, las aerolíneas redujeron los vuelos, los cruceros paralizaron sus operaciones, la ocupación hotelera cayó dramáticamente y se perdió la mayoría de los empleos del sector.
De manera tal que el sector turístico se enfrenta a su peor crisis que haya podido enfrentar en muchos años.
Expresa Enrique de Marchena Kaluche, pasado presidente de la Asonahores y de la Asociación de Hoteles y Turismo del Caribe (CHTA) »La República Dominicana tiene varias condiciones que deben convertirla en el ave fénix, de esta crisis en la región. Tenemos el mejor y más completo producto turístico en todo el Caribe y Centro América, por la oferta de sol y playa, por la enorme y variada oferta hotelera, gastronómica, deportiva, cultural y ecológica, y sin dudas, por su gente”, expresó.
El impacto económico está a la vista, pero estamos en condiciones de restablecer nuestra economía y de la cuidadosa implementación de los protocolos sanitarios dependerá en buena medida el éxito que tengamos en el regreso de los turistas al país.
